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A lo largo
de nuestra vida nos enseñan muchas cosas pero nadie se ha parado a explicarnos
cómo llevar una relación de pareja. Normalmente es algo que vamos aprendiendo
porque nos fijamos en las relaciones de los adultos, en la televisión, en
nuestra casa, de modo que, a veces, adquirimos conductas y actos que nos pueden
parecer normales o cotidianos y no lo son.
Ahora que sabemos que es la violencia, tendríamos que preguntarnos ¿cuáles son las conductas que se consideran violentas? Existen situaciones que nos ayudan a detectar los malos tratos, si alguna de ellas aparece de forma puntual, no significa maltrato, pero deberás estar alerta por si se repiten. Tienes que fijarte en la frecuencia de las cosas desagradables que puedes vivir en tu relación, de modo que mantenemos conductas violentas hacia nuestra pareja si:
- Critico su forma de vestir y/o pensar.
- Prohíbo que se arregle mucho.
- Me enfado si no avisa que va a salir o dónde va a ir
- La comparo constantemente con otras personas.
- No tengo en cuenta sus decisiones.
- Me molesta si la llaman o sale con un amigo/a.
- La presiono para mantener relaciones sexuales.
- Me enfado constantemente por cosas sin importancia
- Grito o le empujo.
- Le digo cosas que se que le hieren cuando discutimos.
- Le controlo las llamadas/mensajes del móvil o del correo electrónico.
- Le controlo el dinero que gasta o lo que compra.
- La dejo plantada con frecuencia
- Me río de mi pareja delante de sus amig@s.
- Le acuso de coquetear cuando la veo con otros chicos o chicas
- La amenazo cuando no hace lo que quiero o le digo que le voy a dejar.
En tercer lugar nos quedaría por saber qué podemos hacer para evitar las conductas violentas y llevar a cabo una relación en la que nos sintamos a gusto. Lo principal es basarla en el respeto, que es algo que podemos hacer de manera muy simple, adoptando una serie de conductas positivas como son:
- Considerar sus opiniones tan importantes como las tuyas aunque sean diferentes.
- Organizar actividades que os agraden a los dos y divertiros juntos.
- El tiempo que pasas con tu pareja es tan importante como el que pasas con tus amistades.
- Ten confianza para hablar de cualquier tema y escucha a tu pareja porque seguro que tiene cosas interesantes que decir.
- Cuando discutáis o tengáis algún problema intentar buscar soluciones satisfactorias para ambos, a través del diálogo y la negociación, sin usar la imposición, la amenaza o el chantaje emocional.
- Compartir cosas con otras personas realizando actividades por separado, así mantendréis vuestro espacio, con vuestras aficiones, amistades y familia.
- Acepta a tu pareja tal y como es sin tratar de cambiarla, apreciando sus cualidades y aceptando sus defectos.
Por último hay que destacar que las relaciones amorosas pasan por etapas donde hay tanto aspectos positivos como negativos, porque somos personas distintas, con distintos intereses, deseos y personalidades y por eso mantener una relación solo tiene sentido cuando nos aporta cosas positivas la mayor parte del tiempo. Pero si comienzas una relación y no te acaba de convencer, debes sentirte libre para terminarla. No tiene sentido que tengas a tu lado a una persona para hacerle daño o que simplemente no la hagas feliz, ¿no crees?.
Temas relacionados:
Tema de la semana: Violencia en el noviazgo
Si
pensamos que podemos estar actuando mal y queremos corregir esa conducta, lo
primero que debemos tener claro es ¿Qué es la violencia de género?, ya que normalmente pensamos que la
violencia es solo aquella que se ejerce de forma física, pero en verdad cuando
hablamos de Violencia de Género nos referimos a "Toda conducta o
comportamiento que atenta contra la dignidad e integridad física y moral de las
mujeres por el hecho de serlo, como manifestación de la discriminación, la
situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las
mujeres".
- Critico su forma de vestir y/o pensar.
- Prohíbo que se arregle mucho.
- Me enfado si no avisa que va a salir o dónde va a ir
- La comparo constantemente con otras personas.
- No tengo en cuenta sus decisiones.
- Me molesta si la llaman o sale con un amigo/a.
- La presiono para mantener relaciones sexuales.
- Me enfado constantemente por cosas sin importancia
- Grito o le empujo.
- Le digo cosas que se que le hieren cuando discutimos.
- Le controlo las llamadas/mensajes del móvil o del correo electrónico.
- Le controlo el dinero que gasta o lo que compra.
- La dejo plantada con frecuencia
- Me río de mi pareja delante de sus amig@s.
- Le acuso de coquetear cuando la veo con otros chicos o chicas
- La amenazo cuando no hace lo que quiero o le digo que le voy a dejar.
En tercer lugar nos quedaría por saber qué podemos hacer para evitar las conductas violentas y llevar a cabo una relación en la que nos sintamos a gusto. Lo principal es basarla en el respeto, que es algo que podemos hacer de manera muy simple, adoptando una serie de conductas positivas como son:
- Considerar sus opiniones tan importantes como las tuyas aunque sean diferentes.
- Organizar actividades que os agraden a los dos y divertiros juntos.
- El tiempo que pasas con tu pareja es tan importante como el que pasas con tus amistades.
- Ten confianza para hablar de cualquier tema y escucha a tu pareja porque seguro que tiene cosas interesantes que decir.
- Cuando discutáis o tengáis algún problema intentar buscar soluciones satisfactorias para ambos, a través del diálogo y la negociación, sin usar la imposición, la amenaza o el chantaje emocional.
- Compartir cosas con otras personas realizando actividades por separado, así mantendréis vuestro espacio, con vuestras aficiones, amistades y familia.
- Acepta a tu pareja tal y como es sin tratar de cambiarla, apreciando sus cualidades y aceptando sus defectos.
Por último hay que destacar que las relaciones amorosas pasan por etapas donde hay tanto aspectos positivos como negativos, porque somos personas distintas, con distintos intereses, deseos y personalidades y por eso mantener una relación solo tiene sentido cuando nos aporta cosas positivas la mayor parte del tiempo. Pero si comienzas una relación y no te acaba de convencer, debes sentirte libre para terminarla. No tiene sentido que tengas a tu lado a una persona para hacerle daño o que simplemente no la hagas feliz, ¿no crees?.
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