Para disfrutar de la sexualidad
y conseguir alcanzar el placer del orgasmo lo primero que hay que tener es una
visión positiva de la sexualidad, lo que en sexología se llama la erotofilia,
el amor por la erótica. Para alcanzarla vamos a dar hoy unas ideas sobre
diferentes formas que existen de llegar el orgasmo. Como siempre espero que sea
de vuestro interés.
Vamos a empezar por el mayor
órgano sexual que existe, que como ya sabéis es el cerebro, de modo que
comenzaremos eliminando las ideas negativas y los prejuicios que tenemos sobre
la sexualidad.
Tenemos que tener claro que en
lo que a los temas de sexualidad se refiere, no hay nada bueno o malo, normal o
anormal, simplemente cada persona, cada pareja y cada cultura tiene su forma de
expresar la sexualidad. De modo que si tu objetivo es alcanzar el orgasmo en
tus relaciones lo primero que debes tener en cuenta es que tú misma eres la
persona responsable de marcar los límites y decidir cómo quieres vivir tu
sexualidad, lo estarás haciendo bien si disfrutas y haces disfrutar a tu
pareja. En esto es en lo que tienes que centrar tu atención, no en el que dirán
los demás o en los sentimientos de culpabilidad por disfrutar con tu cuerpo.
Una vez que tu mente esté limpia
de pensamientos negativos, damos un paso más y ahora es fundamental que
conozcas cómo responde el cuerpo de la mujer ante los estímulos sexuales, es
decir, la respuesta sexual humana. Cuando mantenemos relaciones sexuales el
cuerpo pasa por distintas fases que conducen, en algunos casos, al orgasmo;
conocer estas fases para saber identificarlas es de gran importancia para poder
llegar a la fase del orgasmo y conseguir relaciones más placenteras. (Este tema
ya ha sido tratado en el blog anteriormente, y para no hacerme muy repetitiva,
dejo el enlace con la información relativa a la respuesta sexual tanto de la
mujer como del hombre.)
Continuando con nuestro
objetivo de alcanzar el orgasmo, el siguiente paso será conseguir información
de carácter educativo sobre sexualidad, ya que si por diferentes motivos no has
recibido educación sexual, tendrás que tener claro que nunca es tarde para
empezar a aprender. Hay muchos lugares en los cuales podrás recabar
información, pero en verdad no te tienes que ir muy lejos, puesto que este blog
es una fuente de información donde, con tan solo investigar un poco, puedes
aprender mucho.
También te recomendaría la
lectura de literatura erótica, ya que con este tipo de lectura ampliarás tus
conocimientos sobre el mundo sexual y te abrirá la mente a un sinfín de
posibilidades para alcanzar la felicidad sexual.
Otra opción es ver películas
eróticas o pornográficas, siempre teniendo en cuenta que algunas son mucho más
ficticias que reales, de modo que nos servirán de inspiración pero no como ejemplo
de relación. Aquí dependerá de tu gusto o lo que te apetezca en un momento
determinado, ya que vas a encontrar prácticas sexuales diferentes que te
servirán de guía para tus encuentros sexuales, solo tienes que elegir aquellas
con las que te sientas más cómoda y ponerte manos a la obra.
Una vez que tienes superada la
parte teórica, es el momento de pasar a la práctica, porque toda teoría va
acompañada de su práctica para así afianzar los conocimientos, puesto que con
todas las ideas anteriores la mente estará lo suficientemente entrenada y
predispuesta para conseguir placer.
Pero no podemos lanzarnos del
tirón debemos ir poco a poco, y es ahora cuando toca trabajar, si eres de esas
mujeres que nunca ha tocado ni mirado sus genitales ya va siendo hora de saber
qué guardas entre las piernas. Y si en cambio ya lo sabes desde hace tiempo, no
viene mal una rueda de reconocimiento, ya que los genitales femeninos están tan
escondidos que en nuestro día a día a penas lo vemos. De modo que comenzaremos
la exploración con las manos, primero sin estimular, solo para reconocer el
terreno.
Cuando comprobamos que todo
está en su sitio es momento de estimular tu zona genital y puedes hacerlo de
diferentes maneras:
Autoestimulación o estimular la
zona genital tú misma: puedes usar como escenario la bañera o pie de ducha
porque el chorro de agua de la ducha es una de las formas más fácil de alcanzar
el orgasmo. Para ello dirige el chorro de agua hacia el clítoris con una
presión consistente, notando cómo el chorro masajea el clítoris, durante unos
cinco minutos más o menos.
Otra forma de autoestimulación
puedes conseguirla con el uso de un vibrador, son muy útiles para conseguir el
orgasmo. El más adecuado para estos casos es un vibrador pequeño especial para
estimular el clítoris, aunque se puede jugar introduciéndolo en la vagina, es
importante centrarte en el clítoris al ser la zona más sensible y la mejor para
alcanzar la fase orgásmica. Lo mejor es probar el vibrador de diferentes formas,
posturas y situaciones, así sabrás cómo te gusta más.
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Estimulación en pareja: antes
de llegar a este punto es importante que la mujer haya conseguido el orgasmo
con la masturbación ella sola. Así conocerá su cuerpo y sabrá cual es el tipo
de estimulación que la conduce al clímax. Cuando adquieres práctica y seguridad
con la masturbación es buena idea masturbarte delante de tu pareja, pero solo
tocas tú y la pareja mira, resulta muy excitante y además verá cómo te
acaricias y le ayudará a estimularte como a ti te gusta. Para dar un paso más
ahora será tu pareja la que te masturbe siguiendo tus indicaciones, ya no
tienes excusa para no disfrutar, guíale paso a paso en tu camino hacia el
placer.
Penetración con estimulación del
clítoris: la mejor postura para esta práctica es aquella que te permita la
penetración vaginal por detrás mientras acaricias el clítoris con tus manos o
lo hace tu pareja con un vibrador.
En conclusión, si tienes
dificultad para conseguir llegar al orgasmo te recomiendo que vayas paso a
paso, empezando por tu mente hasta llegar a la penetración con estimulación,
debes controlar cada tipo de estimulación antes de pasar a la siguiente. Estas
ideas son parte del tratamiento que se utiliza en terapia sexológica en los
casos de anorgasmia. Por el contrario, si eres una mujer que llega al orgasmo
sin dificultad te servirán para experimentar y conocer tu cuerpo mucho mejor.
Ya lo decía la sexóloga Helen
Kaplan: “a menos que se den enfermedades físicas o mentales graves, o se
interponga un conflicto conyugal insuperable, todas las mujeres son capaces de
tener orgasmos” ¿Y tu?
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