Las manos son un elemento muy
importante en la estimulación de nuestros genitales. Estimularse manualmente es
una forma más de alcanzar el clímax, aunque siempre se haya considerado parte
de los preliminares antes del coito. La masturbación es una práctica sexual muy
placentera que puede realizarse de forma aislada o como parte de una relación
sexual con penetración. Todo depende del momento y nuestras necesidades
sexuales.
Cuando estimulemos los
genitales masculinos no nos centraremos sólo en el pene, también acariciaremos
el escroto. Son muchos los hombres a los que les gusta que le estimulen los
testículos de forma suave, cogiéndolos, acariciándolos, masajeándolos e incluso
les hace un poco de cosquillas. Les producen sensaciones muy placenteras.
Una manera de estimular el pene
y el escroto al mismo tiempo es agarrar con una mano el tronco del pene y con
la otra agarrar el escroto formando un anillo con el dedo pulgar e índice. Las
dos manos se mueven de arriba abajo al mismo tiempo y en la misma dirección.
Otra opción es cuando el pene está flácido
coge el tronco del pene con una mano y con la otra coloca las yemas de los dedos
alrededor de la corona moviéndolos igual que si estuvieras exprimiendo una
naranja.
O una más sencilla es con una mano mueve el pene de
arriba abajo y con la otra acaricia el glande con la palma de la mano.
Elige una y ponla en práctica, solo así sabrás si es de tu agrado.
Elige una y ponla en práctica, solo así sabrás si es de tu agrado.
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